Mayorkas, abogado y exfiscal federal, llegó a Estados Unidos con apenas un año de edad, cuando sus padres, un judío habanero y una judía rumana, huyeron a los Estados Unidos escapando comunismo, persecución y abuso tras el triunfo de la revolución Cubana en 1959.

Vivió de cerca los graves problemas, los miedos, las irregularidades legales, la inestabilidad emocional de los refugiados e inmigrantes en general. Su nominación es un importante paso en favor de los inmigrantes.

Orgulloso de sus orígenes como Cubano e inmigrante, Alejandro Mayorkas se licenció con honores en la Universidad de California, en Berkeley, y se graduó de Derecho en la universidad jesuita Loyola Marymount, en Los Ángeles. Poco después inició su carrera como abogado en el sector privado, como parte del bufete O'Melveny & Myers. Actualmente, además de su labor en el DHS, mantiene el oficio de abogado desde la firma internacional WilmerHale, y es muy conocido su trabajo con organizaciones sin fines de lucro en servicios legales a los pobres, el reasentamiento de refugiados y la educación de jóvenes desfavorecidos. Recordemos que su trabajo fue de vital importancia para desarrollar el programa DACA que permitió que miles de niños que llegaron ilegalmente a Estados Unidos puedan desarrollarse y muchos de ellos forman parte de la primera línea de defensa frente a la pandemia del COVID-19.

Trabajo como Director de inmigración (USCIS por sus siglas en Ingles), recibió numerosos premios de organizaciones cívicas y comunitarias, incluidas la Illinois Coalition for Immigrant and Refugee Rights, la Coalition for Humane Immigrant Rights of Los Angeles (CHIRLA) y Mexican American Legal Defense and Education Fund (MALDEF).

Esperamos ansiosamente que empiece su cargo en El Departamento de Seguridad Interior (Homeland Security en Ingles) quien como el dijo, "tiene la noble misión de ayudarnos a mantenernos a salvo y continuar nuestra orgullosa historia como país de bienvenida".